El proyecto participó en el Concurso Nacional de Anteproyectos para la Sede Corporativa del Correo Oficial de la Republica Argentina SA (Buenos Aires, Argentina).
El Concurso Nacional de Anteproyectos para la Sede Corporativa del Correo Oficial de la República Argentina SA consiste en el diseño integral de un nuevo edificio.
Se descarta la adecuación del edificio existente por ser inviable su dado los nuevos requisitos y las superficies que el Correo ahora propone.
El Concurso Nacional de Anteproyectos para la Sede Corporativa del Correo Oficial de la República Argentina SA consiste en el diseño integral de un nuevo edificio.
Se descarta la adecuación del edificio existente por ser inviable su dado los nuevos requisitos y las superficies que el Correo ahora propone.
Nuestra propuesta consiste en dotar al edificio de un fuerte carácter simbólico e icónico, que resignifica el medio urbano inmediato, y actúa como remate del eje formado por la Plaza general San Martín, Plaza Fuerza Aérea Argentina y Plaza Cañada.
De esta forma se genera un nuevo espacio urbano como consecuencia del planteo formal propuesto, logrando su inserción en la trama urbana y revitalizando a su entorno degradado.
Esto se logra a través de tres situaciones de acceso al edificio: primero por la plaza seca ubicada en la ochava, segundo por el acceso jerárquico dado por las escalinatas y su gran altura, y tercero por la gran plaza "urbana" semicubierta de acceso al edificio y su jardín vertical con una altura de 40 metros que actúa como elemento sorpresa dentro de la configuración.
Mediante este recurso se produce una integración urbana que adquiere carácter de lugar de permanencia, de reposo, de conmemoración y de integración que el lugar está necesitando y que concibe al edificio dotado de un fuerte carácter emblemático y de una gran identidad.
La plaza "urbana" de acceso al edificio crea a través de su gran altura y tratamiento bioclimatico un espacio verde dentro del edificio, transformándose en el corazón del mismo.
Esta remata en la azotea en paneles fotovoltaicos para producir energía solar para abastecimiento del edificio, que también se podría vender a la red eléctrica generando superávit.
De esta forma la plaza genera un entorno acondicionado y más fresco que el resto de la calle.
Además transforma la fachada en un jardín vertical que devuelve el verde a los ciudadanos y que le dará un aspecto cambiante al entorno durante las distintas estaciones del año.
Siguiendo las nociones bioambientales es que en la azotea se plantea un techo verde, que reconstruye en horizontal el verde que fue ocupado en el terreno por el edificio y que actúa como filtro de agua de lluvia para su tratamiento y adecuación.
Así se genera, una plaza abierta para los habitantes del edificio y un espacio de integración y relax.
En definitiva, se trata de un edificio pensado para convertirse en un icono a través de la arquitectura formal y calidad de espacios significativos que plantea pero también a convertirse en un símbolo de edificio energéticamente eficiente a través de conceptos ambientales.
ELM | Estudio Leonardo Maskivker Arquitectos
Maria Church
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Y en qué quedó este hermoso proyecto...
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